Harry Hopeman pertenece a una dinastía de diamantistas cuyos orígenes se remontan a los tiempos de la Inquisición. Un día recibe el encargo de recuperar un diamante que está en poder de un egipcio y que es reclamado por la Iglesia católica. La novela describe la historia de este diamante desde los tiempos bíblicos hasta la actualidad y su relación con los antepasados de Hopeman, quienes participaron en su tallado.
Ficção