Resenhas - A Sonata a Kreutzer

Leila de Carvalho e Gonçalves 18/07/2018

Todo Casamento É Um Embuste
Enfatizando a influência da música em nosso espírito, Tolstói escreveu uma novela inspirada na Sonata a Kreutzer, de Beethoven. De difícil execução, essa sonata foi composta para piano e violino, uma boa metáfora para o tema escolhido pelo escritor: o relacionamento entre o homem e a mulher.

Seu cenário é um trem e o protagonista, um passageiro que matou a esposa por ciúmes. Curiosamente, o texto assemelha-se a um monólogo, à medida que o narrador, um companheiro de viagem, pouco interfere no discurso do assassino.

Pozdnyshev descreve o matrimônio como um embuste, chega ao ponto de afirmar que o sexo é o principal responsável pela degradação humana e, ao reforçar a ideia da virgindade, chega a pregar extinção de nossa espécie...

Sem dúvida, é a obra mais controvertida de Tolstói. Mesmo antes de sua publicação em 1891, cópias de seu manuscrito já circularam dentro e fora da Rússia, escandalizando os leitores.

Enfim, fica minha recomendação e para quem não conhece, aproveite a oportunidade para ouvir a sonata.

Carlos 17/07/2018

"...donde hay celos y rencillas, allí hay desorden y toda clase de malas obras" (Santiago 3,16).

La calidad de este libro es sencillamente incuestionable, tanta que cinco estrellas no son suficientes para reflejar la maravilla contenida en tan pocas páginas. Este es el primer libro que leo del gran Lev Tolstoi y, ciertamente, no será el último. Su genio literario es, sencillamente, como se diría en buen francés superbe!

De entrada he de señalar que este libro rezuma pensamientos y sentimientos tan extremos con relación al matrimonio y al rol de la mujer que resultan excesivamente conservadores incluso para la época y el lugar en el que esta obra fue escrita; las ideas expuestas por el protagonista me resultan chocantes incluso para mí, que desde mi más tierna juventud me declaro conservador y de derecha, pero ciertos extremismos no me agradan.

No me resulta fácil clasificar o, incluso, asignar una categoría específica al tipo de ideas y pensamientos que el protagonista expone sobre todo en relación al sexo y al rol del sexo en un matrimonio. Algo que es completamente normal en cualquier relación y más en un matrimonio es expuesto aquí como la causa última de todos los males que aquejan al mundo. Ciertamente, en todas las épocas el interés por el sexo ha motivado todo tipo de acciones (un ejemplo incluso lo hallamos en la Biblia en el interés carnal que manifestó David por Betsabé, consumada su relación y habiendo quedado ésta embarazada, decidió deshacerse de su marido, ver 2Sam 11,1-16), pero no al punto relatado en este libro.

Considero que el punto central de esta obra son los celos, éstos son el verdadero desencadenante de las acciones fatales que llevan al desenlace de la obra y, tal como se expone en la cita bíblica con la que se inicia esta reseña, donde están éstos, pasa de todo. Tolstoi no inventó la pólvora al relatar como unos celos desmedidos condujeron al personaje narrador a actuar como lo hizo, sino que se limita a relatar algo que, lamentablemente, era ya corriente en su tiempo y sigue, muy a pesar de todos los esfuerzos, sigue siendo un mal endémico de la sociedad a día de hoy.

Basta con observar los noticieros o echar una rápida lectura a cualquier periódico para percibir que la tasa de asesinatos cuyas víctimas son mujeres a manos de parejas o ex parejas es alarmante, este es un mal que aqueja tanto a Paraguay (mi país) como a toda Latinoamérica e incluso parte de Europa. Tan solo piénsese en este libro escrito en Rusia en el siglo XIX y compárese con la situación actual, personajes como Pózdnyshev las hay a montones y no en las páginas de un libro, sino en la vida real, dejando que sus celos los carcoman y matando mujeres reales a raíz de ello. Lo acertado de la cita de la carta de Santiago queda patente con la sola observación de la realidad.

Recuerdo haber leído en una revista especializada de Psicología que una persona afectada por los celos es capaz de ver fantasmas donde no existen. Tolstoi nos muestra en este libro el perfecto ejemplo de ello. En verdad, no sabemos si de veras ocurre o no un contacto sexual entre la esposa de Pózdnyshev y el músico, pero en la mente de éste (y para un celoso esto es suficiente) ello ya había ocurrido y era suficiente.

He de decir que durante toda la lectura el aplomo con la que Pózdnyshev relata lo ocurrido me ha dejado turbado, anonadado, éste no expresa autocompasión, pero sus absurdas palabras son un intento por justificar lo injustificable; Tolstoi, desde mi punto de vista, construyó un, como le llamaríamos en Paraguay, "caradura" perfecto.

Finalmente, he de decir no creo que todas las ideas expuestas en el libro con relación al sexo, al rol del sexo en la vida de las personas y de los matrimonios, en cuanto al papel de la mujer sean ideas que correspondan únicamente al personaje encargado del relato, sino que, y de ello estoy casi convencido, corresponden al mismo Tolstoi. Existen autores, como Dostoyevski, que dejan hablar al personaje sin involucrarse directamente en la historia y dejando sobre éstos todo el peso de la narración. Otros, en cambio, hacen uso de la voz tercerizada que les proporciona la literatura para hablar a través de sus personajes. No sé si será así en otras obras suyas, pero en ésta, es Tolstoi quien habla a través de Pózdnyshev, y el rumbo que tomó su vida en cierto momento constituye un fuerte fundamento que apoya mi pensamiento.

Tolstoi escribió obras maestras hiper-voluminosas como Anna Karennina y Guerra y paz y otras obras mucho más cortas, como este libro, pero no por ello menos intensas, de menor calidad, como ya decía Pushkin, no hace falta escribir textos largos para escribir algo de calidad. Este corto librito es la muestra perfecta de ello.

Nos veremos de vuelta, Tolstoi.

Carlos 17/07/2018

"...donde hay celos y rencillas, allí hay desorden y toda clase de malas obras" (Santiago 3,16).

La calidad de este libro es sencillamente incuestionable, tanta que cinco estrellas no son suficientes para reflejar la maravilla contenida en tan pocas páginas. Este es el primer libro que leo del gran Lev Tolstoi y, ciertamente, no será el último. Su genio literario es, sencillamente, como se diría en buen francés superbe!

De entrada he de señalar que este libro rezuma pensamientos y sentimientos tan extremos con relación al matrimonio y al rol de la mujer que resultan excesivamente conservadores incluso para la época y el lugar en el que esta obra fue escrita; las ideas expuestas por el protagonista me resultan chocantes incluso para mí, que desde mi más tierna juventud me declaro conservador y de derecha, pero ciertos extremismos no me agradan.

No me resulta fácil clasificar o, incluso, asignar una categoría específica al tipo de ideas y pensamientos que el protagonista expone sobre todo en relación al sexo y al rol del sexo en un matrimonio. Algo que es completamente normal en cualquier relación y más en un matrimonio es expuesto aquí como la causa última de todos los males que aquejan al mundo. Ciertamente, en todas las épocas el interés por el sexo ha motivado todo tipo de acciones (un ejemplo incluso lo hallamos en la Biblia en el interés carnal que manifestó David por Betsabé, consumada su relación y habiendo quedado ésta embarazada, decidió deshacerse de su marido, ver 2Sam 11,1-16), pero no al punto relatado en este libro.

Considero que el punto central de esta obra son los celos, éstos son el verdadero desencadenante de las acciones fatales que llevan al desenlace de la obra y, tal como se expone en la cita bíblica con la que se inicia esta reseña, donde están éstos, pasa de todo. Tolstoi no inventó la pólvora al relatar como unos celos desmedidos condujeron al personaje narrador a actuar como lo hizo, sino que se limita a relatar algo que, lamentablemente, era ya corriente en su tiempo y sigue, muy a pesar de todos los esfuerzos, sigue siendo un mal endémico de la sociedad a día de hoy.

Basta con observar los noticieros o echar una rápida lectura a cualquier periódico para percibir que la tasa de asesinatos cuyas víctimas son mujeres a manos de parejas o ex parejas es alarmante, este es un mal que aqueja tanto a Paraguay (mi país) como a toda Latinoamérica e incluso parte de Europa. Tan solo piénsese en este libro escrito en Rusia en el siglo XIX y compárese con la situación actual, personajes como Pózdnyshev las hay a montones y no en las páginas de un libro, sino en la vida real, dejando que sus celos los carcoman y matando mujeres reales a raíz de ello. Lo acertado de la cita de la carta de Santiago queda patente con la sola observación de la realidad.

Recuerdo haber leído en una revista especializada de Psicología que una persona afectada por los celos es capaz de ver fantasmas donde no existen. Tolstoi nos muestra en este libro el perfecto ejemplo de ello. En verdad, no sabemos si de veras ocurre o no un contacto sexual entre la esposa de Pózdnyshev y el músico, pero en la mente de éste (y para un celoso esto es suficiente) ello ya había ocurrido y era suficiente.

He de decir que durante toda la lectura el aplomo con la que Pózdnyshev relata lo ocurrido me ha dejado turbado, anonadado, éste no expresa autocompasión, pero sus absurdas palabras son un intento por justificar lo injustificable; Tolstoi, desde mi punto de vista, construyó un, como le llamaríamos en Paraguay, "caradura" perfecto.

Finalmente, he de decir no creo que todas las ideas expuestas en el libro con relación al sexo, al rol del sexo en la vida de las personas y de los matrimonios, en cuanto al papel de la mujer sean ideas que correspondan únicamente al personaje encargado del relato, sino que, y de ello estoy casi convencido, corresponden al mismo Tolstoi. Existen autores, como Dostoyevski, que dejan hablar al personaje sin involucrarse directamente en la historia y dejando sobre éstos todo el peso de la narración. Otros, en cambio, hacen uso de la voz tercerizada que les proporciona la literatura para hablar a través de sus personajes. No sé si será así en otras obras suyas, pero en ésta, es Tolstoi quien habla a través de Pózdnyshev, y el rumbo que tomó su vida en cierto momento constituye un fuerte fundamento que apoya mi pensamiento.

Tolstoi escribió obras maestras hiper-voluminosas como Anna Karennina y Guerra y paz y otras obras mucho más cortas, como este libro, pero no por ello menos intensas, de menor calidad, como ya decía Pushkin, no hace falta escribir textos largos para escribir algo de calidad. Este corto librito es la muestra perfecta de ello.

Nos veremos de vuelta, Tolstoi.

José Carlos 13/08/2017

Outra vez o trem (quem já leu Anna Kariênina vai me entender). É nele, dentro da cabine de um, que entramos em contato com o dramático Pózdnichev e sua terrível história, a qual nos conta após intrometer-se num debate sobre casamento e a liberdade da mulher.

Arredio e de maneira afetada, ele nos arrasta consigo pelo inferno que se tornou seu matrimônio, descrevendo todas as etapas alcançadas até o seu desfecho. O ciúme e a paranóia dão tom angustiante à narrativa.

O mais interessante nesta obra, em minha opinião, além das descrições que em determinados momentos me deixaram aos prantos, são os debates sobre a condição da mulher. O que mais espanta é não só percepção àquela época (estamos falando de fim do século XIX) mas a exposição, através da literatura, numa espécie de denúncia, de que a mulher era vista tão somente como "instrumento de prazer".

Em A Sonata A Kreutzer, Tolstói, pelos lábios de um ciumento marido, nos conta uma historia comum - infelizmente - e que ainda hoje acontece. Por isso, talvez, as lágrimas.

Como na música do Caetano: "sobre toda a estrada, sobre toda sala/ paira, tenebrosa, a sombra do ciúme"... Outra vez o ciúme.

Priscila (@priafonsinha) 20/05/2017

Tolstói nunca decepciona. S2
Que livro espetacular!! Daqueles que viciam e não conseguimos parar de ler até concluir a obra. Junto com "A morte de Ivan Iliitch" essa é considerada uma das novelas mais importantes de Tolstói.
A história acontece num vagão de trem onde Pódzdnichev desabafa a um passageiro o motivo que o levou a assassinar sua esposa. Ciúmes, relações extra conjugais, machismo, ódio, e claro, música, que dá nome ao livro. Aliás, a parte da Sonata no texto é particularmente magnífica.
Livro inquietante, perturbador, um desabafo ao não saber amar, com uma escrita fabulosa!
P.S. Mesmo que não leiam o livro, ouçam a "Sonata de Kreutzer" de Beethoven que deu nome à obra, é magistral!

Theo 03/01/2017

Dificil descrever este livro.

A estória acontece em um vagão de trem, Pózdnichev (protagonista) desabafa a um passageiro a "razão" de ter assassinado sua mulher.
O protagonista é tomado pelo ódio e ciúme e mata sua esposa por uma suposta traição que não é revelada para o leitor .

Tolstoi basicamente usa Pózdnichev para expressar sua posição sobre o relacionamento entre homem e mulher, foi escrito no final do século 19 mas boa parte das críticas abordadas ainda são muito atuais.

Aborda temas como machismo, adultério, filhos, ciúme, mulher como objeto sexual, o casamento e aborda o amor x ódio, que é presente a cada página do livro.

Anoca Freitas 08/02/2016

Inquietante
Não sei exatamente como descrever essa história, contada em primeira pessoa, num diálogo intenso em um vagão de trem. O que lhes recomendo é: ao chegar à parte XXIII, enquanto leem, ponham a "Sonata a Kreutzer" (Beethoven) para tocar (há excelentes execuções no Spotify, por exemplo). Se a sua imersão na história já era verdadeira, dessa maneira se tornará ainda mais real.

Lucas 03/01/2016

O tom exaltado do monólogo, pleno de uma lucidez implacável com auto-ilusões e de uma franqueza radical com a moral humana, remete ao homem do Subsolo de Dostoiévski, bem como aos protagonistas de Houellebecq - para François (de "Submissão"), uma saia curta pode mudar tudo na vida de um homem; para Pózdnichev, o personagem desta novela, o que considera-se como amor não passa de uma malha justa no corpo de uma mulher. A principal limitação desta novela é o fato de que quase não há contraponto ao monólogo. De qualquer forma, a discussão que propõe sobre temas como a moral, o amor, o sexo, o prazer, a felicidade, o ego, a beleza, a verdade - e até a música! - é arrebatadora na sua capacidade de relativização e no seu ceticismo com relação à condição humana.

Jansen 10/11/2015

Ode à fidelidade
Muito bom.
Considera o celibato a maneira ideal se não implicasse no fim da humanidade. Todo o enredo acontece num vagão de trem onde um assassino confesso conta a um passageiro a razão de ter tirado a vida da esposa. Defende com unhas e dentes a fidelidade no casamento e apresenta varias justificativas para tal. Defende o cristianismo e entende que a mulher deve ser recatada ao extremo para não despertar sentimentos ligados ao sexo nos homens. São colocações muito fortes e radicais, no entanto absolutamente lógicas quando frente ao cristianismo. Era posição assumida por Tolstoy.
O momento da Sonata é grandioso. O ciúme do protagonista contamina a obra de Beethoven, quando condena a música como incentivadora do pecado. Mais que isso, relata a ligação dos movimentos da Sonata com as relações entre as pessoas. É um momento alto do livro.

LaraF 13/06/2014

que lucidez do autor! um olhar clinico, analitico e muito critico sobre o comportamento humano e a dinamica das relaçoes! ainda mto atual! ;)

Caroline Gurgel 14/04/2014

Para Tolstói, a música perverte.
Não foi o fato desse livro ser considerado uma das melhores obras de Tolstói que despertou meu interesse, foi o título. Como fã de música clássica e em especial da de Beethoven, eu não resisti ao ver sua linda sonata para violino e piano nº9 op.47, A Sonata a Kreutzer, estampada na capa de um livro escrito por ninguém menos que Tolstói.

Sabendo que, obviamente, se tratava de um livro de domínio público, procurei sua versão digital gratuita e comecei a leitura. Não foi minha primeira tentativa em livros de domínio público, foi, talvez, a décima. E a última! Cheguei a conclusão de que não adianta insistir nelas, ou você paga por uma boa tradução (ou tem a sorte de, vivendo no Brasil, morar em uma cidade que tenha uma biblioteca decente) ou é melhor deixá-las de lado. São péssimas traduções! Ainda li uns 30% e me perguntava se aquelas frases desconexas eram propositais. Não eram. Criei vergonha na cara e comprei a edição da editora 34 que, diga-se de passagem, tem feito um trabalho majestoso na tradução diretamente dos originais russos.

Voilà Retomei a leitura do início e, wow!, nem parecia a mesma história que eu iniciara antes. Incrível! A escrita é fantástica e leva o leitor a entrar nos devaneios e alucinações do personagem principal, que, por menos provável que seja, não é o narrador.

Trata-se de um diálogo - praticamente um monólogo - entre o narrador e um homem que assassinara sua esposa por achar que ela o traíra com um pianista. Eles se encontram em um trem e o tal assassino começa a contar o que o levou a cometer tal crime enquanto devaneia sobre casamento, amor, sexo e o papel da mulher na sociedade. São visões super pessimistas e controversas que fazem com que o leitor crie uma repulsa em relação ao personagem - ou ao autor, já que a linha que os separa é bem tênue e, dizem, Tolstói estava bastante deprimido quando escreveu essa história.

"...supõe-se em teoria que o amor é algo ideal, elevado, mas na prática o amor é ignóbil, porco, sendo repugnante e vergonhoso falar e lembrar-se dele. [...] as pessoas fingem que o repugnante e vergonhoso é belo e sublime."

Tolstói fala que a mulher é sempre vista como um objeto de prazer e para que assim não o seja ela deve manter-se casta por toda a vida.

"Veja toda a poesia, toda a pintura, toda a escultura, a começar pelos versos de amor e pelas Vênus e Frineias despidas, o senhor vê que a mulher é um instrumento de prazer; ela é assim nas ruas de Trubá e de Gratchovka, e também no baile da corte. E observe a artimanha do demônio: ora, um prazer, um deleite, podia-se bem admitir isso, dizer que a mulher é um bocado doce. Não, a princípio, os cavaleiros afirmavam venerar a mulher (veneravam, mas assim mesmo olhavam-na como um instrumento de prazer). E agora asseguram que respeitam a mulher. Uns cedem-lhe o lugar, levantam-lhe um lenço; outros reconhecem o seu direito de ocupar todos os cargos, de participar no governo, etc. Fazem tudo isso, mas o modo de encará-la é sempre o mesmo. Ela é um instrumento de prazer. O seu corpo é um instrumento de prazer. E ela sabe disso."

Alfineta a relação entre mãe e filho, a medicina e os médicos, o feminismo e o cavalheirismo, religião e casamento. Dá, inclusive, a entender que a música perverte o ser humano. Por fim, já nas horas que antecedem o assassinato, seu diálogo rodeia o ciúme e a dúvida. Um ciúme doentio que cega e tem consequências graves. E a dúvida que o persegue, ela o trai ou não? Por mais que a pessoa não queira verdadeiramente uma resposta, ela quer saber a verdade, como se, no fundo, tivesse alguma esperança de suas desconfianças serem infundadas.

"Até lembro confusamente, que tendo cravado o punhal, no mesmo instante o retirei, querendo corrigir, deter, o que já fora realizado. Por um instante, fiquei imóvel, esperando o que ia acontecer, procurando ver se era possível corrigir aquilo."

E mostra-nos arrependimento, mesmo que passageiro, mostra-nos a inconseqüência dos atos impensados e imaturos, de agir com a cabeça quente, sem pensar.

É possível que você seja contra tudo o que é citado em um livro e ainda assim o achar fenomenal? Foi bem o que me aconteceu nesse livro. A história é narrada com maestria, prende e instiga, e por mais que irrite, não há como não gostar.

Devo apenas mencionar minha decepção em relação a sonata que tanto amo e que, a meu ver, não teve esse destaque todo. Digo a meu ver pelo que li da estória em si, sem contar com o posfácio, que explica melhor a influência que tal música teve nessa história.

★ ★ ★ ★ ★
❤ ❤ ❤ ♡ ♡

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Despeço-me deixando o link da sonata no youtube interpretada pela majestosa violinista alemã Anne-Sophie Mutter e pelo grande pianista Lambert Orkis. Na história de Tolstói a esposa assassinada é a violinista e o suposto traidor, o pianista. A música, o motivo da traição.

http://youtu.be/COGcCBJAC6I

dan 29/10/2013

Traduzir é trair!
Essa máxima aplica-se a Boris Schnaiderman? Bom! Na verdade não... Leiam suas traduções sobre a obra de Tolstoi. Liev Tolstói, também conhecido como Léon Tolstói ou Leão Tolstoi, Lev Nikoláievich Tolstói (em russo Лев Николаевич Толстой) (9 de setembro de 1828 - 20 de novembro de 1910) foi um escritor russo muito influente na literatura e política de seu país (...) bláblábláblá. + conhecimento acesse - Existe uma profusão de saber cuidadosamente compostos e lançados ao ermo, impedindo a visibilidade, ou trunfos de ambos. Mas o leitor sincero, assíduo, voraz, que não têm o que fazer na vida e enfia a cara num grosso livro. Pouco importa quem é quem. Deseja apenas desfrutar das delícias que exalam das páginas destes manuscritos. Viadagem total. Mas é verdade. Atemo-nos numa celebre novela: Sonata a Kreutzer. Sobre sonata de mesmo nome, que por sinal uma raridade composta pelo nosso amigo Ludwig Van Beethoven. Sem comentários. Bem esta tal novela; relata de maneira clara e precisa toda aflição de um corno. Isso mesmo q você lera. CORNO! Aposto com todas as letras que Leon foi corno. Como um simples mortal que nunca, antes, sentira o peso dos chifres descreveria tais aflições com tantas nuanças? Tá certo q havia uma trilha sonora inspiradora... Não percam as traduções de Boris Schnaiderman.


site: http://pt.wikipedia.org/wiki/Liev_Tolst

Raquel 04/09/2013

Perturbador
Incrível como Tolstói escreveu A Sonata A Kreutzer e Felicidade Conjugal, dois livros que tratam de casamento, um na visão feminina e outro na masculina, que é o caso do atual livro.

Logo no começo o narrador mostra como foi inserido no mundo sexual das mulheres, ou seja, na adolescência começou a frequentar casas de prostituição. Diferentemente dos outros, Pózdnichev se manteve fiel à sua esposa, a qual escolheu devido a sua pureza.

Porém ele fala das suas ideias e sentimentos em relação às mulheres. Mostra o machismo, pois a mulher servia apenas como objeto de cunho sexual, além disso era extremamente dominador e ciumento, ao ponto de matar a esposa por suspeitar de uma traição.

Pesado, tenso, perturbador são alguns dos adjetivos pra tentar explicar o que senti ao ler este livro. Tolstói escreveu com maestria os sentimentos de um homem atormentado pela raiva e o ciúme.